Nada engaña más que nuestra propia mente... nada piensa mejor que nuestro corazón.
Un yo, que en realidad no soy yo, entra en mi, se apodera de mi mente y mis manos le obedecen. Me hace pensar, y en mi subconsciente me deja flotando con sus ideas nocivas, diferentes, extrañas a lo usual de la realidad. Esto es reflejo de lo que me deja sin hablar. Sólo pensando en el sentido de lo real:
Hay oportunidades, muchas, pero en verdad en ciertos momentos no las sé aprovechar. Vienen, se van, o se acumulan, de pronto no puedo más y estallan, como un globo, trayéndome sus consecuencias y no sé que hacer al final.
He perdido la noción de este mundo, me parece todo extraño, desconocido, nuevo, como si fuera la primera vez que lo aprecio con mis ojos. Son momentos tontos, tal vez. Pero mi ser desaparece, y deja en este mundo a mi cuerpo deambulando sin que hacer. Lucho mucho contra la realidad en este mundo, trato, pero termino agotado y enfadado con muchos. Siento que no tengo lugar, no tengo hogar, no tengo a quien abrazar y en su hombro poder llorar, hasta gastar todo líquido en mi cuerpo sin gozo. Hago mucho, pero obtengo poco.
¡Absurdo mundo! Todo están abstracto y raro. ¿Soy yo contra el mundo o el mundo contra mí? No es lo mismo, pero el resultado da igual; no termino sintiéndome cómodo en este lugar. Tal vez el mundo no está preparado para mi; tal vez yo no estoy preparado para lo que me impone el mundo... ¡tonterías! Todo está en mi cabeza. De cierto modo no importa, termina siendo igual. Espero lograr lo que pienso, pero el mundo me alcanza acabar; sin embargo,. ellos aun no conocen mi fuerza. El mundo no sabe quien soy en realidad. ¿Estaré dispuesto a que el mundo me reconozca? ¿Serán ellos capaces de adaptarse a mi mente?
Sólo sé que el mundo será muy difícil de cambiar.
Mejor espero que todo retorne a su lugar y así yo podré a muchos asombrar. Mi mente, demente está ya de tanta discordia; sólo busco la armonía de la gloria.
Hay oportunidades, muchas, pero en verdad en ciertos momentos no las sé aprovechar. Vienen, se van, o se acumulan, de pronto no puedo más y estallan, como un globo, trayéndome sus consecuencias y no sé que hacer al final.
He perdido la noción de este mundo, me parece todo extraño, desconocido, nuevo, como si fuera la primera vez que lo aprecio con mis ojos. Son momentos tontos, tal vez. Pero mi ser desaparece, y deja en este mundo a mi cuerpo deambulando sin que hacer. Lucho mucho contra la realidad en este mundo, trato, pero termino agotado y enfadado con muchos. Siento que no tengo lugar, no tengo hogar, no tengo a quien abrazar y en su hombro poder llorar, hasta gastar todo líquido en mi cuerpo sin gozo. Hago mucho, pero obtengo poco.
¡Absurdo mundo! Todo están abstracto y raro. ¿Soy yo contra el mundo o el mundo contra mí? No es lo mismo, pero el resultado da igual; no termino sintiéndome cómodo en este lugar. Tal vez el mundo no está preparado para mi; tal vez yo no estoy preparado para lo que me impone el mundo... ¡tonterías! Todo está en mi cabeza. De cierto modo no importa, termina siendo igual. Espero lograr lo que pienso, pero el mundo me alcanza acabar; sin embargo,. ellos aun no conocen mi fuerza. El mundo no sabe quien soy en realidad. ¿Estaré dispuesto a que el mundo me reconozca? ¿Serán ellos capaces de adaptarse a mi mente?
Sólo sé que el mundo será muy difícil de cambiar.
Mejor espero que todo retorne a su lugar y así yo podré a muchos asombrar. Mi mente, demente está ya de tanta discordia; sólo busco la armonía de la gloria.
Comentarios
Publicar un comentario